Reunión de trabajo en Florencio Varela para fortalecer el modelo de crudo asistido

La experiencia desarrollada en el complejo penitenciario de Florencio Varela muestra cómo un enfoque de alimentación digna en contextos de encierro puede fortalecer la salud y la reinserción social.



 

Nos reunimos con el equipo de líderes de Grupo L en el complejo penitenciario de Florencio Varela, donde llevamos adelante la implementación del modelo de racionamiento en crudo asistido. Este esquema, que Cook Master desarrolla hace tiempo en distintas unidades carcelarias del sistema penitenciario argentino, constituye una modalidad de servicio innovadora que impacta socialmente en las personas privadas de la libertad y en la comunidad penitenciaria en su conjunto.

El modelo de crudo asistido consiste en entregar alimentos frescos y materias primas acompañadas de asistencia técnica, para que sean las propias personas privadas de la libertad quienes preparen sus comidas. Esto no solo garantiza una alimentación variada y de calidad, sino que también genera un espacio de aprendizaje práctico en el manejo de alimentos, la organización del trabajo y la cooperación en equipo.

De esta manera, la alimentación se convierte en una oportunidad formativa: el proceso cotidiano de preparar y cocinar los alimentos favorece la adquisición de hábitos saludables y, al mismo tiempo, abre la posibilidad de adquirir competencias útiles para la reinserción social y laboral a través de la cocina.

La experiencia demuestra que el modelo de crudo asistido tiene un doble impacto: mejora la gestión alimentaria en el ámbito penitenciario y, a la vez, brinda herramientas para que las personas privadas de libertad puedan proyectar un futuro con mayores oportunidades. En Cook Master entendemos que estas acciones son parte de nuestro compromiso con una alimentación digna y con la construcción de soluciones que trasciendan los muros del encierro.